QUE EL SEÑOR LOS BENDIGA Y LOS GUARDE

Yo oro diligentemente sobre estos mensajes, y cuando oraba sobre lo que el Señor quería que escribiera en éste mensaje en particular, el Espíritu Santo susurró claramente: “Anima al pueblo de Dios. Diles cuán amados son del Señor y cuánto él se deleita en sus hijos.”

 

Yo creo que esta es una palabra especial para muchos que leen este mensaje. Usted necesita escuchar profundamente adentro, en esta hora,  que el Señor lo va a cuidar, y que en esta hora de prueba, él se deleita en usted. Aquí está el texto que yo creo que usted necesita para recibir una palabra personal de él ahora mismo:

 

            “No menosprecies hijo mío (hija mía), el castigo de Jehová, no te canses de que él te corrija, porque Jehová al que ama castiga, como el padre al hijo que quiere” (Proverbios 3:11-12).

 

             Aún si por lo que usted está pasando ahora mismo es disciplina amorosa, recuerde que es una señal segura de que su Padre le ama y se deleita en usted. Si usted recibe esta palabra – de que él lo ama profundamente y se regocija por usted – usted sabrá que todas las cosas están trabajando para el bien de usted, y que sus pasos están verdaderamente siendo ordenados por él.