SUS TESOROS DE INCALCULABLE VALOR

Dios ha determinado lograr sus metas aquí en la tierra a través de hombres con flaquezas.

Isaías, el gran guerrero de oración, era un hombre al igual que el resto de nosotros. David, el hombre conforme al corazón de Dios, era un asesino adúltero que no tenía ningún derecho moral a ninguna de las bendiciones de Dios. Pedro negó al mismo Señor Dios del cielo, maldiciendo a Aquel que más lo había amado. Abraham, padre de naciones, vivió una mentira, utilizando a su esposa como una garantía para salvar su propio pellejo. Jacob era un conspirador. Adán y Eva transformaron un perfecto arreglo matrimonial en una pesadilla. Salomón, el hombre más sabio de la tierra, hizo algunas de las cosas más estúpidas jamás registradas en la historia. José se burló de sus hermanos en casi infantil alegría, hasta que el juego casi se volvió en contra de él. Jonás despreció la misericordia de Dios para con un pueblo arrepentido y quería ver arder a toda una ciudad para justificar sus profecías en contra de ella. Lot ofreció a sus dos hijas vírgenes a una turba de sodomitas enloquecidos por el sexo.

La lista sigue y sigue, hombres que amaban a Dios, hombres que fueron usados grandemente por Dios, casi se fueron al suelo por sus debilidades. Sin embargo, Dios siempre estaba allí diciendo: “Yo te llamé y estaré contigo. ¡Voy a cumplir mi voluntad pese a ello!”

Una de las escrituras más alentadoras de la Biblia es 2 Corintios 4:7: “Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros”. Luego Pablo continúa describiendo los vasos de barro: hombres moribundos, atribulados en todo, perplejos, perseguidos, abatidos, e incluso así nunca desamparados o en desesperación. Esos hombres usados por Dios están constantemente gimiendo bajo la carga de sus cuerpos, esperando ansiosamente ser revestidos con los nuevos.

Dios se burla del poder del hombre. Se ríe de nuestros esfuerzos egoístas de ser buenos. Él nunca usa al grande y poderoso, sino que en lugar de eso, usa las cosas débiles del mundo para confundir a los sabios.

“Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es,…a fin de que nadie se jacte en su presencia.” (1 Corintios 1:26-29).

Dios pone sus tesoros de incalculable valor en vasos de barro, porque se deleita en hacer lo imposible de la nada.