ÉL CUIDA DE TI

El Señor dice tanto a ricos como a pobres: “No te inquietes por sus posesiones terrenales. Dame tiempo de calidad y confía en mí. Yo cuidaré de todas sus necesidades futuras y te supliré de todo lo esencial para vivir”.
Esta es una lección que todo creyente debe aprender y practicar.
En este momento, los eventos mundiales se suceden tan rápidamente que nadie puede seguirle el paso. Estamos rodeados de violencia y las barreras morales han sido derribadas. Las implicaciones de tales cosas son demasiado profundas y complejas de entender.
LUZ EN LA OSCURIDAD
Nuestra fe está anclada en esto: Nuestro Padre Celestial nos conoce – Él sabe exactamente lo que necesitamos y cuándo lo necesitamos – y el solo hecho de que lo sepa, es prueba suficiente de que estamos bajo su cuidado. Él se deleita en nosotros, y nosotros estamos escondidos en su regazo, seguros y firmes.
Daniel dijo del Señor:
“Conoce lo que está en tinieblas, y con él mora la luz” (Daniel 2:22).
Dios conoce todo con respecto a los oscuros días que vendrán, y sabe que ni siquiera esta oscuridad puede esconder su rostro de nosotros.
CONFÍA EN SU GRAN AMOR
De hecho, nuestro camino de escape en medio de los tiempos difíciles será hallado sólo confiando en el Señor. Él nos llama hoy a tener la confianza simple de un niño en su fidelidad.
¡Mantengamos los ojos en Jesús! Confiemos en su gran amor y cuidado para con nosotros. “Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros” (1 Pedro 5:7).