¿HAS ESTADO ESCUCHANDO LAS MENTIRAS?

Así que, ¿ha estado escuchando las mentiras de Satanás acerca de su caminar con Jesús? ¿Ha estado pensando que es indigno, que no puede adorar a Dios hasta que haga todo perfecto? Tengo buenas noticias para usted. Sabemos que Satanás es un mentiroso pero puedo demostrarle que a Usted, Jesús le ha hecho limpio, digno de estar ante Él y de servirle con fidelidad.

¿Cómo le hizo digno? Por el sacrificio de Cristo en la cruz se le da todo el derecho de adorar y servir al Señor.

"Para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios; fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad; con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en la luz que nos ha librado de la potestad de las tinieblas y nos ha trasladado al reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de los pecados "(Colosenses 1:10-14).

La traducción griega de este pasaje es: "El Padre nos ha hecho apropiados, dignos, con competencia de carácter, lo suficientemente buenos para ser partícipes de la herencia de los santos en la luz".

Lo que Jesús hizo en la cruz le da derecho a la herencia eterna. Y si Dios le ha clasificado para la vida eterna, entonces Él le ha hecho fuerte en su carácter. Usted puede "parar" su ministerio durante un mes, un año, toda una vida tratando de hacerse cualificado para él y trabajar en su carácter en un esfuerzo por llegar a ser lo suficientemente bueno para ser usado por Dios. Pero nunca podrá satisfacer los criterios por su cuenta.

Incluso si usted fuera capaz de ganar la victoria sobre todas las cosas que ha hecho mal y todo mal pensamiento que ha tenido, todavía no estaría calificado a la vista de Dios; es imposible. ¿Por qué? Porque Dios no aceptará ninguna justicia excepto la de su propio Hijo, Jesucristo.

No se puede obtener la justicia de Cristo, trabajando para ello. La única manera de lograrla es creer y confiar en Dios por ella. ¡Todo sucede por la fe en lo que Jesús ha hecho!