¿QUÉ HACER CUANDO USTED ESTÁ ABRUMADO? by Gary Wilkerson

¿Qué hace usted cuando se siente agobiado? ¿Qué hacer cuando parece que las probabilidades están en contra de usted y no tiene los recursos suficientes? ¿Usted regresa a su casa de noche y continúa estresado, lleno de ansiedad y miedo? Si quiere llegar al lugar donde se ve la victoria en su vida, tendrá que luchar por ella y, en la lucha, Dios proveerá la fuerza. Él suplirá los recursos que necesita y usted saldrá de la lucha como un adorador de Jesucristo.

Hace tres años mi padre, David Wilkerson, me entregó el liderazgo de World Challenge. Papá aún estaba aquí para apoyarme y alentarme; si alguna vez me encontraba en medio de una batalla que no estaba muy seguro cómo manejar, llamaba a papá. En abril de 2011 él falleció en un accidente de auto y me encuentro sin ese recurso en particular en mi vida para ayudar a World Challenge. A veces, cuando suceden cosas difíciles, siento que entra un poco de miedo ¿Qué pasa si no tengo lo que se necesita? ¿Qué pasa si no manejo bien esta situación?

Un día, mientras estaba pensando en estas cosas, el Espíritu Santo vino sobre mí y trajo confianza a mi corazón. Me di cuenta de que si Dios me estaba guiando, si Él estaba diciendo: "Este es el camino que debes seguir," entonces todo lo que tenía que hacer era confiar en Él. Yo no tengo que mirar la línea de color negro o la línea roja y buscar dónde están las finanzas, tengo que mirar al cielo y ver lo que Él dice que debo hacer. Y eso es lo que estamos haciendo. Vamos a ir más que nunca, vamos a llegar a más gente que nunca antes, vamos a tocar las vidas de más niños que nunca antes, todo porque nosotros no vamos a permitir que el enemigo traiga temor para entrar en nuestras vidas.

Algunos de ustedes están en una batalla en estos momentos. Puede que no sea financiera. Podría ser en sus relaciones, problemas incluso con sus propios hijos. Cualquiera que sea la batalla, tengo una palabra buena para Usted: ¡no se rinda en la batalla! ¡No se rinda intercediendo! No permita que los recursos limitados le hagan pensar que de alguna manera Dios está limitado en poder.

¡No se rinda!