DISTRACCIONES EN EL LUGAR SANTO

Quiero compartir con ustedes acerca de las distracciones mentales que ocurren en particular en la casa de Dios durante los tiempos de oración y adoración. Jesús calificó de hipócritas a aquellas personas que venían ante Su presencia con palabras llenas de elogios pero cuyas mentes y corazones se encontraban lejos de Él. Jesús les habló directamente a ellos diciendo, “Ustedes me dan sus bocas y labios pero su mente está en otro lugar. ¡Su corazón está alejado de mí!

¿Qué le sucede a usted? Seguramente usted acude a la casa de Dios una hora a la semana. Su cuerpo está en la iglesia pero dónde está su mente. ¿Su boca dice, “Yo te alabo Señor,” pero su corazón está a millas de distancia?¿A dónde lo llevan sus pensamientos durante la alabanza y adoración? ¿Usted se encuentra ocupado en cuestiones familiares o asuntos de negocios que le aquejan? ¿Cuán distraído se encuentra usted durante esa hora en la que acude a la iglesia mientras la congregación se acerca a la majestuosidad de Dios?

Es peligroso ir a la casa de Dios y entrar a su presencia de manera ligera. “ Luego dijo Moisés a Aarón: «Esto es lo que Jehová afirmó cuando dijo:“En los que a mí se acercan me santificaré, y en presencia de todo el pueblo seré glorificado.” (Levítico 10:3). El Señor le dijo a Aarón, “Yo no seré tratado como una persona ordinaria. Si vas a acudir a Mi presencia, tú debes venir delante de mí santificado. Todos los que se acercan a Mí santidad deberán hacerlo con cuidado, bajo conciencia debido a Mi gloria y majestad.”

Si su corazón no está conectado durante la alabanza, y sus pensamientos no están cautivos a la obediencia de Cristo, es mejor que usted ponga a un hombre de paja en su asiento. Al menos eso es más honesto que el ir a la casa de Dios sin mente ni corazón.

La razón por la cual muchos cristianos no alaban con poder, excitación y entusiasmo es porque ellos no tienen intimidad con Jesús en su hogar. Aquellos que han aprendido a alabar y a enfocarse en privado traen su propio fuego - un fuego encendido en el closet secreto de oración. Los verdaderos adoradores no pueden esperar a ir a la iglesia para alabar al Señor junto con su pueblo.