COMO ROCÍO DEL CIELO
Escudriñando a los profetas podemos averiguar dónde estamos en relación con las profecías. Nos encontramos en Isaías 26 y en Deuteronomio 4:30-31, que dice: “Cuando estuvieres en angustia, y te alcanzaren todas estas cosas, si en los postreros días te volvieres a Jehová tu Dios, y oyeres su voz; porque Dios misericordioso es Jehová tu Dios; no te dejará, ni te destruirá, ni se olvidará del pacto que les juró a tus padres.” ¡Estos versos son para los últimos días, para nuestro tiempo!
Norteamérica fue fundada como una tierra para los rectos. Dios nos favoreció y nos mostró Su bondad, pero nuestra nación no reconoce el poder de Dios y su obra a favor nuestro. Debido a esto, Dios va a enviar pronto juicio: “Con mi alma te he deseado en la noche [los últimos días], y en tanto que me dure el espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte; porque luego que hay juicios tuyos en la tierra, los moradores del mundo aprenden justicia” (Isaías 26:9). La noche del juicio ha llegado en la visión profética de Isaías y el pueblo ve esta noche de oscuridad que cae. Ellos se vuelven al Señor para buscarle con todas sus fuerzas.
Dios está levantando un remanente que esta orando como por dolores de parto. “Como la mujer encinta cuando se acerca el alumbramiento gime y da gritos en sus dolores, así hemos sido delante de ti, oh Jehová. Concebimos, tuvimos dolores de parto, dimos a luz viento; ninguna liberación hicimos en la tierra, ni cayeron los moradores del mundo. Tus muertos vivirán; sus cadáveres resucitarán. ¡Despertad y cantad, moradores del polvo! porque tu rocío es cual rocío de hortalizas, y la tierra dará sus muertos.” (Isaías 26:17-19). Aquí se describe a una mujer “llorando por sus dolores.”
¡Esa mujer es la iglesia viva saliendo de una iglesia muerta! Hay cientos como tú. En los años que pasaron había algo tratando de nacer: un clamor de dolor espiritual. Querías ser liberado, así que anduviste de aquí para allá en busca de la liberación, pero sólo obtuviste vientos de doctrinas contradictorias. ¡Sin embargo, tu corazón despertó y resucitó! “Tus muertos vivirán”, despertaste y ahora cantas una nueva canción. “Tu rocío es cual rocío de hortalizas”, hay gloria del Señor sobre ti, como el rocío del cielo, debido a la luz. “Rocío de hortalizas” se traduce como, “nacido de la luz sobrenatural”. Dios te trajo a la luz de Su gloriosa Palabra. Estás despierto y cantas porque has resucitado de entre los muertos, con una nueva luz de Su Palabra todos los días, como el rocío.
Norteamérica fue fundada como una tierra para los rectos. Dios nos favoreció y nos mostró Su bondad, pero nuestra nación no reconoce el poder de Dios y su obra a favor nuestro. Debido a esto, Dios va a enviar pronto juicio: “Con mi alma te he deseado en la noche [los últimos días], y en tanto que me dure el espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte; porque luego que hay juicios tuyos en la tierra, los moradores del mundo aprenden justicia” (Isaías 26:9). La noche del juicio ha llegado en la visión profética de Isaías y el pueblo ve esta noche de oscuridad que cae. Ellos se vuelven al Señor para buscarle con todas sus fuerzas.
Dios está levantando un remanente que esta orando como por dolores de parto. “Como la mujer encinta cuando se acerca el alumbramiento gime y da gritos en sus dolores, así hemos sido delante de ti, oh Jehová. Concebimos, tuvimos dolores de parto, dimos a luz viento; ninguna liberación hicimos en la tierra, ni cayeron los moradores del mundo. Tus muertos vivirán; sus cadáveres resucitarán. ¡Despertad y cantad, moradores del polvo! porque tu rocío es cual rocío de hortalizas, y la tierra dará sus muertos.” (Isaías 26:17-19). Aquí se describe a una mujer “llorando por sus dolores.”
¡Esa mujer es la iglesia viva saliendo de una iglesia muerta! Hay cientos como tú. En los años que pasaron había algo tratando de nacer: un clamor de dolor espiritual. Querías ser liberado, así que anduviste de aquí para allá en busca de la liberación, pero sólo obtuviste vientos de doctrinas contradictorias. ¡Sin embargo, tu corazón despertó y resucitó! “Tus muertos vivirán”, despertaste y ahora cantas una nueva canción. “Tu rocío es cual rocío de hortalizas”, hay gloria del Señor sobre ti, como el rocío del cielo, debido a la luz. “Rocío de hortalizas” se traduce como, “nacido de la luz sobrenatural”. Dios te trajo a la luz de Su gloriosa Palabra. Estás despierto y cantas porque has resucitado de entre los muertos, con una nueva luz de Su Palabra todos los días, como el rocío.