LOS CONSOLADORES DE DIOS
En todo tiempo que usted muestra misericordia, en todo tiempo que usted manifiesta bondad y gracia hacia otro creyente, usted está dando consuelo.
Un hombre de nuestra iglesia me detuvo después de un servicio y me dijo, “Hermano Wilkerson, déjeme decirle por qué asisto a esta iglesia. Mi madre de noventa años de edad recientemente falleció. Pero en los últimos cuatro años ella estuvo en cama y yo cuidé de ella.”
“A la iglesia que asistía anteriormente, todos los domingos tenía que abandonar el servicio antes de que éste terminara para cuidar de ella. Después de un tiempo, el pastor se cansó de esto y ante toda la congregación me dijo, 'Si te vas a ir, vete ahora antes de que empiece a predicar.'”
“Aquí en Times Square Church, nadie nunca me ha dicho nada acerca de que me voy antes de que termine el servicio. Esto puede significar algo pequeño pero para mí es significativo. Yo no le tuve que explicar a nadie que tenía que salirme temprano porque necesitaba cuidar de mi mamá.”
Misericordia necesita ser otorgada de manera ordinaria, en el diario vivir. Algunas veces la misericordia es simplemente una sonrisa o un abrazo que conlleva comprensión. Ésta puede ser algo tan sencillo como un rostro lleno de amabilidad o una palabra comprensiva hacia alguien que está herido.
Usted nunca puede ofrecer misericordia si está constantemente pensando: “Dios debe estar enojado conmigo. Voy a fallar. Lo sé.” ¿Cómo puede usted ofrecer consuelo a los demás cuando usted aún no ha aprendido a encontrar consuelo en la misericordia de Dios hacia usted? “...para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios...Pero si somos atribulados es para vuestra consolación y salvación; o si somos consolados es para vuestra consolación y salvación, la cual se realiza en el sufrir las mismas aflicciones que nosotros también padecemos.” (2 Corintios 1:4, 6).
Cristianos misericordiosos son consoladores utilizados por Dios. Ellos puedes mostrar y hablar de misericordia y bondad porque han experiementado increíble consuelo gracias a la misericordia que Dios tiene hacia ellos.
Un hombre de nuestra iglesia me detuvo después de un servicio y me dijo, “Hermano Wilkerson, déjeme decirle por qué asisto a esta iglesia. Mi madre de noventa años de edad recientemente falleció. Pero en los últimos cuatro años ella estuvo en cama y yo cuidé de ella.”
“A la iglesia que asistía anteriormente, todos los domingos tenía que abandonar el servicio antes de que éste terminara para cuidar de ella. Después de un tiempo, el pastor se cansó de esto y ante toda la congregación me dijo, 'Si te vas a ir, vete ahora antes de que empiece a predicar.'”
“Aquí en Times Square Church, nadie nunca me ha dicho nada acerca de que me voy antes de que termine el servicio. Esto puede significar algo pequeño pero para mí es significativo. Yo no le tuve que explicar a nadie que tenía que salirme temprano porque necesitaba cuidar de mi mamá.”
Misericordia necesita ser otorgada de manera ordinaria, en el diario vivir. Algunas veces la misericordia es simplemente una sonrisa o un abrazo que conlleva comprensión. Ésta puede ser algo tan sencillo como un rostro lleno de amabilidad o una palabra comprensiva hacia alguien que está herido.
Usted nunca puede ofrecer misericordia si está constantemente pensando: “Dios debe estar enojado conmigo. Voy a fallar. Lo sé.” ¿Cómo puede usted ofrecer consuelo a los demás cuando usted aún no ha aprendido a encontrar consuelo en la misericordia de Dios hacia usted? “...para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios...Pero si somos atribulados es para vuestra consolación y salvación; o si somos consolados es para vuestra consolación y salvación, la cual se realiza en el sufrir las mismas aflicciones que nosotros también padecemos.” (2 Corintios 1:4, 6).
Cristianos misericordiosos son consoladores utilizados por Dios. Ellos puedes mostrar y hablar de misericordia y bondad porque han experiementado increíble consuelo gracias a la misericordia que Dios tiene hacia ellos.