DIOS TIENE EL CONTROL

“Ninguna arma forjada contra ti prosperará…Esta es la herencia de los siervos de Jehová, y su salvación de mí vendrá, dijo Jehová” (Isaías 54:17). Todo lo que Satanás trata de hacer para derribarte, ¡simplemente no funcionará! Aquellas grandes armas dirigidas hacia ti, se derretirán en la presencia del Señor.

En el idioma hebreo original, este versículo se traduciría así: “Ningún plan, ni instrumento de destrucción, ni artillería satánica que puedan empujarte o atropellarte, ya que serán eliminados”. Dios ha prometido destruir el ataque de Satanás sobre ti. La recompensa de aquellos que Le buscan diligentemente es el privilegio de convertirse en más que vencedores. “Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó” (Romanos 8:37).

Durante 365 años, Enoc se libró de todo dardo de fuego. Él vivió en completa victoria hasta su último aliento. Él no se arrastró ni cojeó, ¡sino que salió en un resplandor de vida y gloria! “Por la fe Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber agradado a Dios” (Hebreos 11:5).

“Con justicia serás adornada; estarás lejos de opresión, porque no temerás, y de temor, porque no se acercará a ti. Si alguno conspirare contra ti, lo hará sin mí; el que contra ti conspirare, delante de ti caerá” (Isaías 54:14-15).

Donde hay justicia, hay paz. Serás librado de la opresión y del temor, porque nada les sucederá a los que andan en justicia. “Yo he creado al destruidor para destruir” (Isaías 54:16). Inclusive “el destructor” está bajo el control del Señor. Dios tiene el control sobre todas las armas de destrucción. Nuestra seguridad está en la justicia, encaminar con Jesús ¡y no debemos tener temor absolutamente a nada!